Greenpeace Internacional, busca visibilizar un nuevo flagelo que afecta seriamente a toda la región de Latinoamérica que poco a poco, se va convirtiendo en el nuevo vertedero global de residuos. De hecho, es cada vez más notorio que cumple el rol de “ patio trasero” de los Estados Unidos, de quien recibe toneladas de desechos que perjudican gravemente el medio ambiente y a las comunidades locales.
Greenpeace, una vez más busca visibilizar acerca de una problemática que va en aumento, por ello, se suma al fuerte reclamo de grupos ambientalistas de toda América Latina que ven con gran preocupación como la región se va convirtiendo poco a poco, en el nuevo basurero del mundo. Más precisamente, esta situación es generada por las toneladas de desechos plásticos que son vertidos a lo largo de la fronteras con México o envíados en miles contenedores a distintos países dentro del continente por Estados Unidos.
Las cifras arrojan que desde el los inicios de 2018, los niveles de exportación de desechos plásticos desde Estados Unidos a Latinoamérica han aumentado de modo exponencial,siendo 2023 el año en que mayor cantidad de residuos y basura plástica estadounidense se “exportaron” a numerosos países de latinoamérica desde que destacadas ONG ambientales llevan este tipo de registros.
Según los datos aportados por Last Beach Cleanup, (ONG ambiental) con base en California, hasta mediados de octubre de 2023, Estados Unidos, había enviado en containers, más de 90.000 toneladas de residuos de este tipo.
Un problema ambiental que crece sin control.
La grave y preocupante situación derivó a que en diciembre de 2023, la plataforma ambientalista Gaia, que nuclea a unas 130 organizaciones de Latinoamérica y el Caribe, hiciera pública una declaración en la que exhortaba a los gobiernos de la región a tomar medidas de carácter urgente ante lo que considera como una “situación de emergencia” para toda la región.
“Queremos alertar y hacer visible para todos los habitantes de América, de que estamos transitando un camino que pone en peligro inminente de contaminación muy grave a nuestro medio ambiente, poniendo en peligro la salud humana y en jaque a la naturaleza y sus especies. Esta contaminación por desechos plásticos vulnera los derechos de todos los latinoamericanos de vivir en un entorno seguro para la salud integral y la de sus territorios”, se destacaba en la declaración.
Lo cierto, es que el envío de toneladas de desechos plásticos mediante mega contenedores a toda la región de América Latina es una realidad que va en aumento y a espaldas de los pueblos de la región. Mientras muchos países luchan por crear e implementar mejores sistemas y mejores políticas de reciclado de plásticos, el grueso de este material perjudicial les llega por la puerta trasera, indican los expertos de las ONG ambientalistas.
Los países de América Latina más afectados por los residuos plásticos
El principal destino de las exportaciones de basura y residuos de todo tipo de plásticos es México. Las cifras relevadas indican que, desde el mes de enero a octubre de 2022 este país recibió unas 60.000 toneladas de plásticos, lo que equivale a unos 57 contenedores por día. Sin embargo, miles de toneladas de basura plástica también fueron enviadas durante todo 2023 a Bolivia, Brasil, Argentina, Chile, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Honduras, Guatemala, El Salvador, Panamá, Paraguay,República Dominicana, Perú y Venezuela.
Para la Dra Fernanda Solís, experta en sanidad ambiental de la Universidad Simón Bolívar, de Ecuador : “Las mega exportaciones de contenedores con residuos plásticos comenzaron a aumentar de modo exponencial cuando China anunció por 2018 que dejaría de ser el gran basurero del mundo , y cortó la recepción de este tipo de material. Desde entonces, Estados Unidos vió en América Latina una salida alternativa y a ello fue directo”, explicó la experta a Greenpeace.
“Con gobiernos cuyos marcos jurídicos y regulatorios son muy, frágiles o lábiles como es el caso de toda la región de Latinoamérica, el escenario se presenta como ideal o perfecto para realizar estas importaciones masivas de residuos plásticos” agrega la experta. “Esta situación es algo así como un nuevo imperialismo ,pero de los desechos plásticos . Algo muy grave para toda la región. Un nuevo flagelo ante el que la población, se encuentra vulnerable y sin resguardo y cuyas consecuencias más graves y nocivas se verán en un futuro cercano”, concluyó la experta.