Respirar aire limpio es hoy un verdadero privilegio. Frente a esta amenaza invisible, se suman niveles alarmantes y creciente contaminación que el continente africano aporta al planeta. Greenpeace invita a reflexionar y a luchar por una buena calidad del aire en el planeta.
África, un continente salvaje y provisto de abundantes vergeles de vegetación natural, cuyo aire era considerado puro y de calidad, se está volviendo irrespirable. En la actualidad, este vasto territorio viene sufriendo una situación de franco declive: su nivel de contaminación del aire es el más alto del mundo, y la calidad del aire se ha deteriorado de modo veloz en los últimos 50 años.
La mala noticia, sumada a la anterior, es que un equipo de la Universidad de Birmingham, del Imperial College y de Cambridge, han verificado que la polución de África no se queda allí. Estos niveles sin precedentes de aire contaminado, se expanden por todo el planeta. Por esta razón, los especialistas han convocado a tomar cartas en el asunto y unirse en una iniciativa global para frenarlo con el diseño de estrategias adecuadas.
Los expertos sostienen que abordar este problema requiere la suma de los esfuerzos colectivos de los países africanos, soluciones adaptadas a nivel regional y de la colaboración global. Particularmente, enfatizaron que no alcanza únicamente con los esfuerzos regionales en África para combatir la polución del aire, dada la gravedad de la situación es necesario contar con los esfuerzos internacionales para lograr un cambio real.
Las causas de los altos niveles de contaminación en África
Francis Pope, experto en Ciencias de la Atmósfera de la Universidad de Birmingham explicó : “En África se quema combustible de biomasa para cocinar los alimentos, calentar e iluminar; se da la explotación de petróleo crudo y las actividades de las industria minera de carbón. Por otro lado, están los vehículos , modelos viejos que llegan desde Europa y que contribuyen en gran medida a la mala calidad del aire que se respira en África.
El científico resaltó además que los efectos nocivos no se quedan allí : “ Este aire es muy peligroso y es causa de problemas de salud complejos y a veces mortales para quienes lo respiran. Si esto no fuera una razón de peso para los gobiernos, la contaminación del aire en continente africano, no es sólo un problema para las personas que viven en el continente, sino también para los habitantes de todo el mundo. A ello, se le debe sumar el hecho de que esta situación limita la capacidad en gran medida los esfuerzos para cumplir los objetivos climáticos globales y combatir la emergencia climática actual”.
En esta línea,los especialistas han alzado su voz para pedir la urgente colaboración en el monitoreo continuo del aire a través de la instalación de una red de sensores que permitan construir una imagen detallada de las variaciones de la contaminación del aire y permitan realizar un seguimiento del progreso. Como medida de fondo, sugieren la inversión en energía limpia como la solar,la eólica y la hidroeléctrica para satisfacer la demanda energética en el África, que se espera se duplique para 2040.
Una estrategia posible para lograr un aire de calidad en el planeta
“Es primordial trabajar en la mejora de la gestión de los residuos sólidos para evitar el vertido y la quema de residuos . Esto haría mejorar las tasas de reutilización, reciclaje y recuperación -destaca Pope-. Además, sería muy bienvenida la inversión en tecnología renovable, que es respetuosa con el medio ambiente y garantizaría que los países africanos puedan desarrollarse y crecer económicamente evitando al mismo tiempo la tecnología obsoleta y contaminante que llega de los países desarrollados”.
Andriannah Mbandi, científica ambiental de la Universidad del Sureste de Kenia y coautora del informe, resaltó que “la carga pesada de la contaminación del aire recae injustamente siempre, en mayor medida sobre las poblaciones más pobres,en los niños y en las mujeres, probablemente porque enfrentan una mayor exposición. Por lo tanto, las acciones en pos a la obtención de un aire limpio contribuirán en cierta medida a nivelar algunas de estas desigualdades en África, además de los beneficios invaluables para la salud de las personas y del medio ambiente”.
Por otro lado, la experta agregó: “No existe una solución única y definitiva para los problemas de calidad del aire en el continente africano, cada región y población cambia en el tiempo, en sus economías y prácticas, por ello, cada una tendrá sus propios desafíos específicos para sortear . Pero si en cada lugar, los gobiernos y las personas tienen una actitud proactiva y se llevan adelante las acciones adecuadas, es posible reducir los niveles de contaminación del aire, lo que significa personas más sanas a nivel regional y global y por ende, un planeta más sano para vivir”.