Gracias a los esfuerzos en materia de concientización en el cuidado y protección de las especies animales de “corte doméstico”, una nueva legislación estipula qué tipo de animales están prohibidos para ser adquiridos como mascotas en los hogares a partir de 2023.
Desde hace un tiempo, en España se ha implementado una prohibición en la cría o tenencia de algunas especies de animales. Algunas de ellas,habían sido integradas en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras en 2013 y eran comercializadas con mucho éxito entre el público ya gozaban de gran aceptación. Sin embargo, se ha detectado que en algunos casos, podrían representar una amenaza para sus dueños y corre peligro debido a la falta de conocimiento acerca de los requerimientos básicos que es necesario implementar para brindarles un hábitat sustituto adecuado.
Por ello, gracias a los esfuerzos de Greenpeace España de la mano de numerosas ONGs de corte ambiental, se logrado que en 2023 entre en vigencia una legislación que establece que en España está prohibido tener en casa animales como mapaches, agapornis, cotorras argentinas,cerdos vietnamitas, erizos o coatíes,tortugas peninsulares, entre otros.
Sin embargo, y pese al éxito logrado en la materia, Greenpeace pretende alcanzar nuevas conquistas. Esto surge debido a que en la actualidad, en muchos países y en España, existe una total incompetencia y desconocimiento por parte de la gente acerca de los cuidados adecuados de muchas otras especies que son comercializadas de modo habitual como mascotas que las llevan a un alto grado de vulnerabilidad.
En los últimos tiempo se viene bregando por lograr leyes de bienestar que incluyan la protección de especies muy populares como , hamsters,ratones, cobayos, chinchillas, tortugas, conejos,periquitos, cotorras,arañas, serpientes, iguanas, geckos, camaleones y aves originarias de otros países. Estos animales , en el futuro podrían ser incluidos en la lista del actual Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, que con su inclusión, prohíbe su cría y tenencia en todo el territorio español.
La Legislación de Bienestar Animal vigente en España establece ciertos criterios para que un animal pueda ser considerado como doméstico, y aquellos que no cumplan los requisitos , deben desaparecer del listado de especies permitidas . En muchos casos se pide a los futuros adquiridos el tener un claro conocimiento de las necesidades ecológicas, etológicas y fisiológicas de la especie para que evalúen si pueden ser atendidas dentro del futuro ambiente doméstico.
Basta de especies invasoras.
Según los expertos, se argumenta la inclusión de ciertos animales en la lista de prohibidos debido a su carácter invasor o al peligro que suponen para la biodiversidad si escapan y no son gestionados adecuadamente, como ocurre con algunos roedores.
Debido a los riesgos ambientales que conllevan, se excluyen de la lista los 1,5 millones de conejos que existen en España . Además, según el Ministerio para la Transición Ecológica, las tortugas también están prohibidas debido a su potencial como portadoras de enfermedades, ya que contienen una alta cantidad de vectores patógenos, como hongos parásitos, que pueden transmitir enfermedades.
Aunque los periquitos son populares en los hogares españoles, la nueva normativa también los prohibirá junto a otras especies de aves exóticas no autóctonas, como las cotorras y los agapornis.
¿Cuál es la posición de la Unión Europea en relación a esto?
Los diferentes países de la Unión Europea no están de acuerdo en relación a las leyes de Bienestar Animal. En Bélgica, recientemente, se ha aprobado una ley que permite tener una variedad de animales como compañía, que habilita la adquisición de conejos, hámsteres, hurones, ciervos, ardillas y cobayos.
Sin embargo, en contraste, en Holanda, la ley de 2015 solamente autoriza la posesión de 30 variedades de animales domésticos. Esto abarca diversos tipos de roedores, conejos y hurones, así como jabalíes, alpacas y búfalos.
Por otro lado, el tráfico ilegal de animales en España es un problema que requiere atención urgente. A pesar de los esfuerzos para combatir este delito, el tráfico de especies protegidas continúa siendo una gran preocupación. Diversas especies de animales, desde reptiles hasta aves exóticas, son objeto del comercio ilegal. Estos animales son capturados de su hábitat natural y luego son vendidos en el mercado negro, a menudo a precios exorbitantes.
El tráfico de fauna silvestre no solo representa una amenaza para la biodiversidad, sino que también es una forma de crueldad animal. Muchos de estos animales son transportados en condiciones inhumanas, lo que resulta en altas tasas de mortalidad.
Es necesario aumentar la seguridad en los aeropuertos y puertos, así como fortalecer la cooperación internacional para combatir este delito transnacional. Además, se deben implementar políticas más estrictas y sanciones más severas para disuadir a los traficantes.
La educación y concientización del público también juegan un papel clave en la lucha contra el tráfico de animales. Es fundamental que la sociedad comprenda las consecuencias negativas de esta actividad y se comprometa a denunciar cualquier sospecha de tráfico ilegal. En resumen, el tráfico de animales en España es una problemática que no puede ser ignorada y es necesario tomar medidas más contundentes para proteger la fauna silvestre y garantizar un futuro sostenible para nuestras especies nativas.