
El cambio climático ya no es una problemática lejana. En España, sus efectos cada vez impactan con más fuerza en un abanico que va desde fenómenos extremos como la reciente DANA en Valencia hasta sequías prolongadas y olas de calor intensas.
Este fenómeno global está transformando de forma radical todo nuestro entorno, afectando de modo directo a la vida cotidiana de las personas, las economías locales y los ecosistemas. Una situación global que es el resultado directo de las actividades humanas que desprenden en la atmósfera emisiones de gases de efecto invernadero, como el metano y el dióxido de carbono.
Entre las actividades más perjudiciales se encuentran el uso de combustibles fósiles, la deforestación, la agricultura intensiva y los procesos industriales. En España, estos últimos tal como la fabricación de acero, cemento y demás productos, se han incrementado debido al crecimiento de la urbanización, impactando de modo negativo en la agudización del cambio climático. El país, por su ubicación y su clima mediterráneo, es de modo particular, muy vulnerable a los embates del clima, y uno de los países de Europa que más sufre sus consecuencias .
El cambio climático no se trata de un fenómeno natural aislado, sino que es un proceso acelerado producto de las actividades humanas y agravado por la falta de políticas de gestión sostenible dentro de los territorios de los países. Sin dudas, está transformando de modo profundo la meteorología en España, afectando directamente el equilibrio ambiental del país y obligando a las personas a replantearse su modo de vida.
Los efectos más problemáticos del cambio climático
1-Incremento de las temperaturas en toda España
Las temperaturas medias en todo el territorio español han experimentado un aumento notable que va entre los 1,7 °C en las últimas 5 décadas y los expertos prevén que seguirán en aumento. Esta situación ha provocado la ocurrencia de olas de calor prolongadas y más frecuentes que han afectado seriamente la salud pública y han elevado el índice de la mortalidad, especialmente en aquellas personas que por la edad (adultos mayores, niños ) o por poseer patologías previas se encuentran más vulnerables a su impacto.
2-Eventos meteorológicos de carácter extremo en España
Fenómenos recientes , tal como la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), según afirman los expertos, serán cada vez más intensos y frecuentes, y su ocurrencia está directamente ligada al cambio climático. Estos episodios, que se manifiestan en lluvias torrenciales e intensas en un lapso corto de tiempo, generan deslizamientos de tierra , inundaciones masivas y serios daños en infraestructuras, viviendas y en vidas humanas.
Sin embargo, otros desastres tal como son la construcción en cauces de ríos, los complejos viviendas en zonas altamente inundables, la falta de prevención y de planes eficientes de gestión urbana, pone en riesgo la vida de las personas y contribuyen al deterioro de los ecosistemas. La acción humana, es el factor por antonomasia , que causa o agrava la ocurrencia de este tipo de fenómenos.
3- La creciente desertificación de todo el territorio español
Las altísimas temperaturas,la deforestación y las sequías prolongadas están acelerando en España, el peligroso avance de la desertificación en zonas áreas del sur y este del país. Este proceso, que avanza lento pero sin pausa, compromete de modo serio la fertilidad del suelo, complica la agricultura y pone en jaque la producción de alimentos, afectando principalmente a las comunidades agrarias que dependen de modo estrecho de esta actividad para su sustento.
4- La creciente pérdida de biodiversidad en el territorio español
El calentamiento global está modificando en lapsos cortos de tiempo los hábitats naturales de muchas especies vegetales y animales, de modo más pronunciado en áreas de montañas y las franjas costeras.
Dado que ocurre de modo abrupto, muchas especies no tienen tiempo de adaptarse y ello implica un pasaporte directo a su extinción. Los desequilibrios profundos en los ecosistemas ponen en riesgo su capacidad de autorregulación y pone en peligro especies emblemáticas tal como es el lince ibérico para España que dependen de forma estrechas de su entorno natural para sobrevivir.
La pérdida de biodiversidad no solo afecta de modo serio a toda la fauna y flora del país, sino que también compromete de gravedad, al conjunto de los servicios ecosistémicos esenciales que son necesarios para el desarrollo de vida humana, tal como son la calidad del agua o la polinización. Por ello, los expertos reclaman a los países del mundo, la aceleración de las políticas de freno al cambio climático y un firme compromiso para revertir la urgente y dramática situación.