
Hoy te invitamos a conocer cómo se realiza el largo proceso de recuperación de los gibones en Phuket, Tailandia. Un equipo experto nos muestra el paso a paso que comienza con el rescate, la reeducación o rehabilitación y la posterior liberación de estos maravillosos animales que se encuentran en la actualidad en grave peligro de extinción.(Parte II)
Desde hace más de dos décadas el Proyecto de Recuperación de Gibones que se realiza en Phuket, Tailandia, viene -a puro pulmón- abriendo caminos de futuro en la selva , el hábitat natural de las 4 especies de gibones autóctonos que existen en el país y se encuentran en peligro de extinción.
Con el paso de los años, el equipo de Recuperación de Gibones , conocido por sus siglas GRP y liderado por el Dr. Thanaphat Payakkaporn, ha ido perfeccionado sus métodos y aprendiendo poco a poco, en base a la experiencia recabada en el trabajo de campo – compuesta de aciertos, errores y fracasos- la dura pero muy estimulante tarea de proteger ,recuperar y reinsertar a los gibones, una especie muy querida por los lugareños, los pobladores nativos de la selva y en toda Tailandia.
Sin embargo, a pesar de la gran estima y cariño que despiertan en la sociedad tailandesa los simpáticos gibones, según indican los datos acumulados por el propio proyecto y los aportados por la UICN, (Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza) la máxima autoridad mundial en conservación de la vida silvestre, la especie se enfrenta en la actualidad, a un dilema crítico. Catalogada por la UICN como en peligro de extinción, debido a la fragmentación de su hábitat natural y a la caza furtiva que tiene como fin el comercio de especies exóticas, su presencia en las selvas asiáticas se encuentra muy comprometida a futuro.
El paso a paso en el rescate de los gibones en Tailandia.
En primer lugar, cuenta el Dr. Thanapat, cuando un gibón es rescatado de una situación de cautiverio , el equipo lo pone en cuarentena y realiza numerosas pruebas de salud al animal que ha sido rescatado Esto permitirá comprobar si tiene alguna enfermedad infecciosa que pueda transmitirse a las personas. Paso siguiente, si las pruebas salen bien, el gibón tiene luz verde para ser prontamente trasladado al centro de rehabilitación.
Cuando el animal ingresa para ser rehabilitado, este proceso implica el despliegue de una serie de técnicas para “enseñar a los gibones a volver a ser animales salvajes”, cuenta el experto en conservación Thanapat. Y añade: “Por ejemplo, se pueden colocar una serie de obstáculos en el suelo del recinto para estimular y animar a los gibones a que empiecen a columpiarse. Se colocan unas pantallas altas que sirven como camuflaje alrededor de los recintos y se trabaja con un sistema de alimentación que se acciona mediante cuerdas para reducir al máximo posible las interacciones de los gibones con los humanos. “Aquí tenemos como equipo una regla de oro”, dice Thanaphat. “Siempre que los animales se encuentran en el área de rehabilitación, por su bien , nunca los volvemos a tocar porque sabemos que esto es necesario para su supervivencia en la selva y que en gran medida, de ello, depende el éxito de su liberación”
Otra parte importante de la rehabilitación, explica Thanaphat , es el proceso de emparejamiento. “Liberar a un solo gibón en la selva es como ir solo a un bar”, dice risueño.“Los machos que andan en solitario en su medio natural, son propensos a iniciar agresiones hacia otros machos, situación que por lo general tiene consecuencias catastróficas. Por ello, encontrar una pareja adecuada para cada gibón es una ardua y larga misión que implica para el equipo,una tarea de observación diaria de las interacciones de los gibones. El equipo , para propiciar los encuentros ha construido lo que han llamado los “túneles del amor” entre los diferentes recintos . Este sistema permite que las nuevas parejas se conozcan e interactúen con gran libertad sin perder su propio espacio. Una vez que las parejas de gibones se han apareado y tenido sus crías, se puede considerar la liberación de toda la familia.
La liberación de los gibones en la selva
Finalmente , la hora más esperada llega para el equipo y es la de la liberación de las familias de gibones recuperados. Esto tiene lugar cuando se identifica un sitio adecuado para realizar la liberación y se evalúan diversos criterios tales como las condiciones ecológicas, el clima propicio y las actitudes locales hacia la vida silvestre. También se analizan factores como la presencia, la densidad y las especies de las poblaciones de gibones en estado silvestre existentes. En todas las liberaciones además, se tiene particular cuidado de que se realicen dentro del área de distribución histórica de la especie para darle la mayor chance de lograr una adaptación exitosa.
Una vez que el equipo considera que una familia está lista para emprender su nueva vida en la selva, sus miembros son trasladados al lugar y liberados. Durante unos dos meses, un pequeño equipo técnico permanece en el lugar de la liberación para supervisar cómo se va dando la adaptación de los gibones y alejarlos de cualquier peligro. Así, poco a poco, la familia de gibones se va familiarizando de modo gradual con los diferentes alimentos silvestres disponibles y el equipo se asegura de que no se adentren en las áreas que presentan asentamientos humanos ni se peleen con otras familias de gibones. El cierre se da cuando una vez que el equipo comprueba que todo ha ido bien y que los gibones se van adaptando con éxito a su entorno natural, simplemente deciden levantar campamento y volver a casa a continuar con su maravillosa misión.