
Greenpeace promueve la toma de conciencia acerca de la importancia de la conservación del medio ambiente para una buena calidad de vida integral que incluye a la salud mental. La contaminación del aire, la degradación de los entornos naturales, la pérdida de biodiversidad y el aumento de la temperatura del planeta afectan directamente al bienestar del hombre. Ser conscientes de ello, es un buen paso para comenzar un cambio
Greenpeace te presenta hoy, una razón de gran relevancia por la cual es vital el compromiso global por el cuidado del Planeta. Nuestra calidad de vida está en estrecha relación con la naturaleza. Y, aunque no queramos pensar en ello, la degradación de nuestros entornos naturales, las sequías, las inundaciones, los calores sofocantes pondrán a prueba la salud mental de las personas.
Afortunadamente, la parte positiva es que estamos a tiempo de actuar y ello en gran medida, hará la diferencia en nuestra realidad que discurre en el día a día. Por ello, hoy realizamos una invitación a valorar los efectos benéficos de un paseo por un bosque aromado, por una playa de aguas limpias y tranquilas o simplemente una caminata por un sendero arbolado mientras se escucha el canto de los pájaros en una plaza de ciudad.
En este camino, exploraremos la relación entre salud mental y medio ambiente para que puedas ser consciente de todo lo que puedes hacer para contribuir con el bienestar de tu comunidad y tu salud mental , cuidando y protegiendo el medio ambiente.
La salud integral del ser humano incluye la del medioambiente
Los graves problemas ambientales producto de catástrofes naturales, como inundaciones, contaminación de suelos y aguas, incendios forestales, ciclones, altas temperaturas, sequías y terremotos que la humanidad viene afrontando en los últimos tiempos tienen un gran impacto en la salud mental,dado que esta depende de la interacción de factores biológicos, psicológicos y sociales.
Así como la degradación ambiental es una grave amenaza , un ambiente sano constituye un factor clave y facilitador de una buena salud mental.Una reciente investigación en relación a las amenazas medioambientales y su impacto en la salud mental arrojó interesantes conclusiones que resumimos a continuación:
La contaminación atmosférica: Cada vez se detecta una ligazón más estrecha entre ciertos contaminantes y una gama de resultados en salud mental que impactan en trastornos de ansiedad,depresión, tristeza y personalidad,
El cambio climático: Existen datos que comprueban que, las consecuencias del cambio climático como son los fenómenos meteorológicos extremos, tienen un profundo impacto en la salud mental causando trastornos de estrés postraumático, angustia, nostalgia y depresión.
El entorno urbano: Existe una asociación directa entre la exposición urbana a la contaminación que afecta directamente nuestra salud mental. Un entorno urbano altamente contaminado genera una propensión en las personas a la agresividad, la angustia y hasta tiene incidencia en un bajo desarrollo cognitivo en los más chicos.
La contaminación acústica: En la actualidad, la contaminación sonora ha sido vinculada de modo estrecho a la aceleración y a la intensificación del desarrollo de los trastornos mentales, impactando en pérdidas de la audición, traumas y molestias auditivas, dificultad para dormir y hasta graves problemas cognitivos.
Los contaminantes químicos: Las investigaciones científicas dan cuenta de una asociación entre las sustancias químicas presentes en el medio ambiente y la obtención de resultados negativos en materia de la salud mental, desde alteraciones hormonales hasta trastornos de la conducta y estrés.
“Una sola salud”: un nuevo enfoque para el desarrollo sostenible
Equipos expertos en salud mental, han elaborado un enfoque que permitirá estar mejor preparados para prevenir, predecir y detectar amenazas sanitarias globales. La definición elaborada establece que, “Una sola salud” es un enfoque unificador e integrador que procura equilibrar y optimizar de manera sostenible la salud de las personas, los animales y los ecosistemas”.
En este concepto se reconoce de modo fehaciente que “la salud de las personas, los animales domésticos y salvajes, las plantas y el medioambiente (incluidos los ecosistemas) están en estrecha relación y son interdependientes”.
De esta manera, la Organización de Naciones Unidas interpela a los múltiples sectores y disciplinas para trabajar de modo conjunto en la promoción del bienestar y en la neutralización de las amenazas para la salud al mismo tiempo que se hace frente a la demanda de energía, agua potable,aire y alimentos sanos y nutritivos.
Hacer frente a los grandes desafíos que tiene en puerta el planeta desde este enfoque de “una sola salud” puede ser útil para afrontar de modo exitoso el futuro. Comenzando desde toda la gama de aspectos relativos al control de enfermedades, desde la detección temprana y la preparación de respuesta, hasta la gestión, mejora y promoción de la salud y la sostenibilidad.
Abordar las cuestiones ambientales con éxito resultará un elemento central y clave para garantizar la salud mental de la humanidad, ya que hacerlo ofrecerá la oportunidad de alcanzar un bienestar multidimensional donde el desarrollo sostenible es y será la clave.