
Cuidar los mares es cuidar la vida que en ellos habita , una fuente de recursos que si bien parecen ilimitados, no lo son. Greenpeace lucha desde hace décadas para evitar la contaminación de las aguas del mar argentino y busca generar conciencia acerca de la importancia de la preservación de estos recursos invaluables para el sostenimiento de la vida del planeta.
La ciudadanía argentina, viene creciendo positivamente en la toma de conciencia acerca de la importancia de cuidar los recursos del mar argentino. En esta línea, ha expresado una fuerte oposición a las actividades mineras que degradan y ponen en peligro la subsistencia de ecosistemas únicos, que son el hogar de numerosas especies de flora y fauna marina, algunas de ellas, en grave peligro de extinción, como la ballena Franca Austral.
Este magnífico mamífero,emblema y Monumento Natural del país, visita las aguas del mar argentino como parte de una etapa de su larga travesía oceánica anual, en la que busca aguas tranquilas y ricas en krill y pequeños crustáceos para descansar, reproducirse, dar a luz y amamantar a sus crías.
La minería off- shore con su maquinaria y sistemas extractivos pone en grave peligro la vida de las ballenas que poseen un delicado sistema de comunicación por sonar, el cual es interferido por las explosiones y el rompimiento del lecho marino en la búsqueda de petróleo. Estos sistemas generan graves fallas en la comunicación de los cetáceos que se desorientan, pierden el rumbo y corren riesgo de acercarse peligrosamente a las costas, donde quedan atrapados en cuestión de horas debido a la rápida bajada de las mareas.
El Mar Argentino y su riqueza única
El Mar Argentino, es parte del Océano Atlántico, un área que posee una superficie de más de un millón de km2. Una vastísima zona del continente o plataforma continental, donde se puede apreciar la presencia de una biodiversidad única. En esta área existen corredores subterráneos o corrientes de mar que empujan y son canal para el tránsito de una infinidad de especies clave para el sustento de la fauna marina del sur . Delfines, pingüinos, focas , lobos marinos y numerosos cetáceos son la riqueza que hoy se debe salvaguardar, especies cuya presencia garantiza la salud integral del ecosistema marino y por consiguiente, de toda la fuente de abundantes recursos que el mar brinda al hombre para su subsistencia.
Las actividades extractivas, que perturban en gran medida la vida marina, no se detienen allí , sino que también involucran a toda la actividad y desarrollos pesqueros de mediana escala , sistemas que apoyan a las comunidades de trabajadores que conforman el sector y a todos aquellos emprendimientos que encuentran en el mar su medio de vida. Esto se debe a que , a medida que va creciendo la actividad minera, inevitablemente tienen ocurrencia grandes o pequeños derrames de petróleo, dañando gravemente las franjas costeras y sus playas y afectando la vida de los ecosistemas marinos, la economía de las ciudades y la belleza del medio ambiente.
En estas zonas costeras se han desarrollado con éxito, desde hace décadas, emprendimientos turísticos y recreativos como los deportes náuticos y la pesca deportiva. Estas actividades brindan bienestar a los turistas y son una fuente de ingresos vitales para los locales.
El foco debe ser la preservación de la biodiversidad del Mar Argentino
La preocupación que ha despertado la degradación de los ecosistemas del Mar Argentino es prioridad número 1 para Greenpeace . Los investigadores y científicos que trabajan con nuestra ONG han redactado un informe que resume los incidentes y accidentes más frecuentes causados por la minería submarina.
Este informe de reciente redacción, reúne los casos donde han ocurrido graves desastres medioambientales por fallas en los sistemas de seguridad de los operativos marinos. Como resultado, la abundante y rica biodiversidad de las zonas intervenidas con este tipo de actividad extractiva han sido enormemente perjudicadas por los grandes derrames de petróleo. Esto ocurre cuando existen fallas humanas en las maniobras o rupturas de las instalaciones debido a una falta de mantenimiento .
No a la extracción petrolera en el Mar Argentino
Greenpeace sostiene que la extracción de petróleo en el área territorial del Mar Argentino es sumamente perjudicial para la biodiversidad marina. La actividad petrolera invade la zona de migración y alimentación de los elefantes marinos, los pingüinos patagónicos y la ballena franca austral, de modo puntual y específico. Esta última especie es un emblema para los argentinos y se encuentra en serio peligro de extinción. Actividades como la mencionada solo agregan un factor para su pronto deterioro y desaparición de las aguas que conforman el Mar Argentino y que por ello, debería su protección , ser prioridad número 1 en nuestro país.