
Gracias al esfuerzo de dos jóvenes expertos en conservación de fauna silvestre,el leopardo persa cuenta hoy con una chance de supervivencia.Greenpeace se une a esta lucha y respalda y alienta los esfuerzos realizados por estos valientes jóvenes en zonas de conflicto armado.
Dos jóvenes conservacionistas de Medio Oriente , Hana Raza y Mohammad Farhadinia, han unido sus conocimientos y esfuerzos para darle al leopardo de Persia una oportunidad para perpetuar la especie. El Leopardo Persa o (Panthera pardus saxicolor), es un felino de extraordinaria y cautivante belleza . Su cuerpo ágil y esbelto , es por las noches una flecha certeza que sorprende a sus presas : ciervos, antílopes y jabalíes que deambulan entre las áridas estepas de montaña y los pastizales de Irán , Armenia y Azerbaiyán. Sin embargo, esta escena puede ser pronto una postal de la naturaleza extinta ya que quedan apenas cientos de estos ejemplares .
Afortunadamente, hace tan solo dos años, Hana Raza y Mohammad Farhadinia , dos ganadores de concursos internacionales relacionados con la conservación de la vida silvestre, decidieron unirse para darle pelea al futuro de los leopardos persas. Su objetivo central fue diseñar un programa de monitoreo y conservación de los leopardos a lo largo de la frontera de Irán e Irak.
Las áreas de frontera de estos países son el hábitat natural para más de los dos tercios de los leopardos de Persia que habitan en Asia occidental . Los esfuerzos de los jóvenes conservacionistas apuntaron a crear a lo largo de esta zona un trabajo estratégico y coordinado para la conservación de la especie. Las amenazas que se ciernen en torno a los leopardos persas hoy, ejercen una gran presión sobre su población y se deben a tres factores puntuales: la caza furtiva, la defensa del ganado y la potencial amenaza que su presencia implica para los asentamientos y pequeños poblados de la región.
Sin embargo, a pesar de que la especie ha sido diezmada por estas causas, todavía una pequeña población de leopardos persas recorren las estepas y pastizales que se encuentran a lo largo de las fronteras de Irak e Irán en búsqueda de su alimento, sin ningún tipo de protección.
Delineando una estrategia de conservación
En 2022 Hana y Mohammad estaban listos para comenzar la aventura y unidos, se propusieron cumplomentar los siguientes objetivos:
* La capacitación y el desarrollo de habilidades específicas para profesionales de la conservación ambiental que se encuentren ubicados en la franja fronteriza de Irak e Irán. La meta es la mitigación de los conflictos ocasionados por los leopardos al interior de las comunidades y lograr la cooperación de los lugareños para el monitoreo de los leopardos.
* Realizar estudios sistemáticos de imágenes captadas mediante cámaras trampa para determinar los circuitos y áreas de asentamiento preferencial de los leopardos.
* Ofrecer charlas de sensibilización y toma de conciencia acerca de la situación crítica en la que se encuentran los leopardos persas entre las autoridades políticas regionales.
La ventaja del uso de tecnología de punta
En el área de Qara Dagh,las cámaras trampa instaladas capturaron con éxito numerosas imágenes de leopardos persas que luego ayudaron a identificar en concreto cada una de las amenazas que enfrentan a diario en su recorrido, cuáles son sus presas potenciales y sus áreas de estancia preferidas. También, las cámaras han captado en acción a cazadores furtivos armados con armas de fuego junto a sus perros.
Esta información ha sido muy útil porque ha ayudado a las autoridades a tomar medidas concretas y desarrollar estrategias para mitigar estas amenazas.
Por otro lado,en Irán , Mohammad contrató a un guardia de seguridad local para patrullar la zona de frontera y prevenir actividades ilegales como la caza furtiva. Gracias a la cooperación local, se pudo construir un puesto o garita de vigilancia de avanzada, equipado con un sistema de monitoreo para controlar las más de 20 cámaras trampa ubicadas a lo largo de toda la frontera.
Greenpeace está orgulloso de que Hana y Mohammad hayan unido fuerzas para luchar por un futuro para los leopardos persas y poder apoyarlos. Esta cooperación a nivel internacional es muy importante desde el punto de vista de la protección de la naturaleza, porque a las especies no les importan las fronteras. La lección que Hana y Mohammad le han enseñado a Greenpeace es que trabajar juntos y aprender unos de otros sólo puede beneficiar la conservación , en este caso, del leopardo persa y de su hábitat natural.