El acuerdo conseguido por la Unión Europea constituye un hito para garantizar un planeta con futuro. Luego de duras negociaciones el Parlamento Europeo ha defendido la posición más necesaria y ambiciosa que impulsa la Alianza Cero Deforestación , Greenpeace y la coalición internacional de ONG,Together for Forests.
El Reglamento acordado por la UE se ha constituído en una clara victoria que corona la lucha llevada adelante durante años por Greenpeace junto a numerosas ONGs de corte medioambiental.
Las nuevas reglamentaciones ponen un marco de seguridad a las actividades industriales y comerciales, y constituyen un paradigma de lucha y conservación por la biodiversidad mundial. Este sistema implementa una normativa que obligará a las compañías que comercializan o venden cierto tipo de materias primas en el mercado de los países que componen la UE a certificar el origen y poder constatar que no procedan de empresas que degradan o destruyen bosques o que cometan violaciones a los derechos humanos.
La Alianza Cero Deforestación está compuesta por una coalición de organizaciones medioambientales que sostiene que la protección de los ecosistemas y los pueblos que los componen es la única vía posible para lograr la transición económica que es necesario realizar para frenar la crisis ambiental y climática.
Responsabilidad mundial por la deforestación
Por el cuantioso volumen de sus importaciones de productos ganaderos y agrícolas, la UE es hoy el segundo en el orden de mayor responsabilidad mundial por la deforestación tropical . Esta situación la ubica después de China (25%), pero por delante de India (10%), Estados Unidos (6%) y Japón (4%). El aceite de palma, la soja y la carne vacuna fueron las principales materias primas que más deforestación tropical sumaron a las cuotas de importaciones de la UE, seguidas por el cacao,el café , el caucho y los productos derivados de la madera. La deforestación que se ha incorporado fue mayor en volumen en relación a las importaciones de países como Paraguay, Indonesia, Brasil y Argentina.
Si bien, el Parlamento de la UE no ha logrado que se aprobaran una gran parte de las enmiendas sugeridas se ha mejorado la propuesta inicial del siguiente modo:
Se logró incorporar el carbón vegetal, el caucho , los productos de papel impreso y una serie de derivados del aceite de palma en el listado de materias primas que deberán pasar bajo estrictos procedimientos de control y vigilancia.
También se ha logrado ampliar la definición de degradación forestal a aquellas acciones que impliquen la conversión de bosques primarios y bosques de regeneración natural en plantaciones forestales o en otras tierras boscosas y la conversión de bosques primarios en bosques plantados.
Los cambios positivos llevan su tiempo
La inclusión del término “Otras Áreas Boscosas” implica que en el ámbito de aplicación del Reglamento, la Comisión evaluará este ítem luego de un año después que haya entrado en vigor. Este detalle significa que, de momento, no estarán protegidos en el ámbito de aplicación de dicho Reglamento aquellos ecosistemas con una menor cubierta de árboles pero que son de gran relevancia para la biodiversidad, el cambio climático y la subsistencia de los pueblos originales . Ello derivará en que se aumente la presión para deforestar las selvas como el Amazonas y otras que se encuentran aún protegidas y tienen gran valor por su rica biodiversidad.
En este sentido,se ha podido obligar a las instituciones financieras a que cumplan una serie de requisitos adicionales para garantizar que sus actividades no están sustentando actividades relacionadas con la deforestación.
También se logró la inclusión de ciertos tipos de carne como la de oveja, cabra y cerdo, las aves de maíz y corral dentro del ámbito de aplicación del Reglamento.
Sin embargo, algunos de estos puntos de gran relevancia podrán tardar más de 1 o 2 años tras su evaluación por parte de la Comisión Europea y la Alianza Cero Deforestación para ser incluidos de modo efectivo en el marco de la lucha internacional contra la deforestación.
Uno de los próximos pasos que deberán dar los países miembros de la UE, es la creación de una Autoridad Competente para supervisar el cumplimiento del Reglamento cuando entre en vigor. En ese orden, la Alianza Cero Deforestación reclama a las Naciones de la UE que se puedan garantizar, en el área de las administraciones públicas competentes, los recursos que se necesiten ,tanto en lo económico como en lo humano y técnico, para llevar adelante la adecuada puesta en marcha y el cumplimiento efectivo del Reglamento, así como medidas adicionales que puedan colaborar a paliar las dificultades económicas que afectan a aquellos sectores que deben reconvertirse por las medidas estipuladas en el Reglamento.